En multitud de ocasiones dejamos que los temores se apoderen de nosotros. Decimos que no, cuando queremos decir que sĆ. Nos callamos cuando queremos gritar y no llegamos a gritar en el momento adecuado.
Se llama miedo. Miedo de lo que podrĆamos no llegar a ser capaces de hacer. O quizĆ” miedo de lo que podrĆa pensar la gente si lo hacemos.
¿Pero sabĆ©is quĆ©? No hay tiempo para tener miedo. DespuĆ©s de todo, ¿no es cierto que sólo vivimos una vez? Pues corre y haz lo que nunca hiciste. Es el momento de atreverse.
Intenta esa jugada que te parece imposible pero que nunca has llegado a probar. Olvida que hay gente alrededor mirando. No te preocupes por una aceptación de otra persona que no seas tú. Nunca te conformes. La verdad es que no tienes nada que perder y todo que ganar.
Nos solemos conformar en vez de atrevernos a arriesgarnos. Sin pensar que cada dĆa cuenta y nunca volverĆ”. Nada estĆ” escrito ni estĆ” hecho. Todo depende de nosotros y nuestra voluntad. Cuando realmente queremos algo con todas nuestras fuerzas, no existe obstĆ”culo capaz de imponerse a nosotros.
No seas un mero espectador. Exige mĆ”s. Vive sin domingos. Corre cada dĆa un poco mĆ”s lejos.
Por quienes siguen corriendo cuando les tiemblan las piernas. Por quienes siguen jugando cuando se acaba el aire. Por los que siguen luchando cuando todo estĆ” perdido. Convencidos de que la vida es un desafĆo.